A muchas personas que les interesa el ámbito espiritual se preocupan bastante por el estilo de vida que llevan en relación con la espiritualidad. Es normal preguntarse si muchas de las cosas que hemos estado haciendo a lo largo de nuestra vida y hasta el momento presente son de ayuda o limitan nuestra capacidad espiritual de evolución; es allí donde entonces nace la necesidad de cambiar o mejorar nuestro estilo de vida actual y enfocarlo mucho más hacia nuestro crecimiento personal y espiritual.
El tarot, como ya hemos repetido en múltiples veces anteriores, puede ser una herramienta muy útil en momentos de duda, desesperación e incertidumbre. Las personas generalmente suelen usar el tarot en estas situaciones; cuando ya no encuentran una salida lógica o cuando algo sobre lo que no tienen control les preocupa. Es aquí donde incluso el más escéptico suele acudir al uso de estas herramientas consideradas por muchos como “poco convencionales”.
Ahora bien, el tarot es mucho más que una simple herramienta usada en momentos críticos; muchas personas han escogido un estilo de vida donde esta herramienta es imprescindible en su cotidianidad; donde su uso es mucho más que la respuesta a un problema momentáneo y efímero.
Incluir al tarot en nuestro nuevo estilo de vida funciona muy bien y nos puede desvelar secretos que anteriormente no éramos capaces de percibir, debido al antifaz que ciega a todas las mentes y que las distrae; ese antifaz que conoces, que sabes que está presente en tu vida, y que es subjetivo y diferente para cada uno de nosotros. En muchas culturas y creencias esta misma es la definición de “satanás”; aquel antifaz figurativo que nos mantiene en la ignorancia y la oscuridad, pero ese es otro tema para un nuevo artículo.
Volviendo al Tarot, debemos entender que incluirlo a nuestra vida es incluir la participación activa y consciente de nuestro inconsciente en los aspectos propios más cotidianos. Es una buena decisión importante, ya que nos permite incluso navegar por los mares de nuestra desconocida inconsciencia, conocerla y posteriormente tener incluso la posibilidad de hacer las paces con nuestros demonios reprimidos. Por supuesto, hablo de resultados lejanos que requieren mucha más práctica y estudios; pero sólo quiero mostrarte las posibilidades que tienes al incluir esta útil herramienta oracular en tus rutinas diarias.
Hay personas que cuando despiertan en las mañanas, tienen la costumbre de meditar aprovechando el reciente estado mental de somnolencia para tener un pequeño acceso limitado a ciertas áreas de la psiquis, entre ellas el inconsciente. Si combinas la meditación con el tarot, puedes recibir el doble de resultados positivos. La meditación también es un tema para otro día, ya que el tema es muy extenso. Esta herramienta ayuda a potenciar la perspicacia y la inspiración que necesitas para ver resultados más rápidos y positivos al momento de tirar tus cartas de tarot.
A lo largo del día, las personas que incluyen el tarot en su estilo de vida suelen utilizarlo en momentos clave donde se desea encontrar una respuesta a algún dilema ético o moral; mostrando respuestas no sólo desde una perspectiva individual (en el caso de nuestra individualidad humana), sino también desde un punto de vista general que nos permite ver nuestra situación como si no nos perteneciera; como si se trata de un problema externo donde por consiguiente, nuestras emociones no alteran nuestra percepción y nuestras decisiones no se ven condicionadas por las creencias de la parte más débil de nuestra mente. En otras palabras, somos capaces de ver el panorama siendo espectadores y no protagonistas.
Esto es tan solo un par de beneficios que te ofrece el incluir el tarot a tu estilo de vida; próximamente si eres capaz de incluirlo, podrás ver con tus propios ojos los beneficios y resultados de llevar una vida mucho más significativa simbólicamente hablando, así como también una gran cantidad de posibilidades que se abren ante tus ojos para entender situaciones que se esconden detrás del velo de la ilusión.