Cuando empezamos en el Tarot, una vez nos hemos decidido, lo normal es tener un poco de lío al tener que decidir por qué tipo de baraja vamos a utilizar y, por si fuera poco, también tenemos los oráculos. En las cartas del Tarot tenemos opciones como la baraja gitana o Lenormand o la baraja Rider Waite. Pero también tenemos las opciones de Oráculo.
Las cartas del Tarot han ido evolucionando a lo largo de los años, sobre todo en los diseños y los colores usados para dar más información en cada carta. Aunque la evolución ha sido constante, lo que no ha cambiado es el número de cartas, 78, y el significado que tienen cada una. Según la orientación del diseñador de las cartas, ha orientado más el estilo del dibujo y la elección de los colores, para darle una orientación más adaptada a lo que él pensaba que debía ir, pero la estructura del Tarot original no ha cambiado.
En los oráculos, el número de cartas, los colores, las imágenes que representan sus mensajes, y el significado de cada una puede variar totalmente de un creador a otro. La libertad de los creadores de oráculos es total, y se diferencian del Tarot en que ellos cambian la estructura libremente.
Lo que sí he podido comprobar a menudo, es que en los oráculos se toman como ejemplo o referencia a las cartas del Tarot. Este último tiene todo los significados que pueden adaptarse a cualquier mensaje que se desee darle al consultante, y es la mejor referencia para guiarse en el diseño y darle a la persona que pregunta, la respuesta que necesita saber.
El Tarot, como ya he dicho, puede tener cambios en su inspiración, unos pueden centrarse más en las figuras y símbolos, y otros más en los palos de cada carta, por ejemplo. Los colores pueden ser más vivos, o menos relevantes para darles más importancia a la figura. En los oráculos, la inspiración sobre la que se basa puede ser infinita. Si se le pregunta al Oráculo sobre el amor, se utilizará uno que base su temática en ese tema, teniendo las cartas bien definidos cada mensaje que más aporte al consultante.
Podemos encontrar el Oráculo de los sueños, Astrológico, de la Bola de cristal, de Tarot, de Runas y un largo etcétera. Según qué quieres saber, puedes elegir un Oráculo u otro.
Normalmente, cuando compramos una baraja de Tarot, suele acompañarle un libro con la base de significados de cada carta, e incluso una breve descripción con el significado de cada una. Esta información es claramente insuficiente, y solo sirve para empezar el camino del conocimiento del Tarot. Después hay que hacer algún curso, o aprender de la gran cantidad de información que hay en Internet sobre la interpretación y el tipo de tiradas de cartas que podemos hacer.
Los oráculos casi siempre van acompañados también de un libro con la explicación necesaria sobre cada carta, y qué mensaje trae cada una.
En las cartas del Oráculo que se ha elegido, normalmente hay una explicación breve, o una frase que guíe en la interpretación de esa carta.
Con el Tarot no existe está pregunta ya que los Arcanos Mayores y Arcanos Menores abarcan todas las facetas de la vida del consultante, y pueden representar un fiel reflejo del camino de la vida de cualquier persona, y dando información valiosa en todos los sentidos. No hay pregunta que se le haga al Tarot, que no pueda responderte. Sin embargo, los Oráculos sí son más concretos, y hay que elegir uno específico para el tema sobre el que se quiera saber. Si, por ejemplo, estás pasando una mala época en lo económico, un Oráculos sobre temas económicos será la mejor opción para saber una predicción que te ayude.